miércoles, 9 de enero de 2008

Locuras matinales...



... Se levantó sobresaltado, como con prisas, caminó por la calle en silencio pero acelerado, sin mirar atrás, con el estómago en vilo, con la mirada perdida al frente ... amanece, niebla, humedad... en el tren, paró por un momento cerró los ojos y al abrirlos vio movimiento, ruido, estrés, gente agolpada deplazándose como autómatas, miradas perdidas, oidos adosados a mp3, caras indiferentes, avisos de llegada, avisos de salida, el sonido de las puertas del tren al abrir y cerrar, murmullos altos, murmullos bajos... Al salir de la madriguera, vuelve a caminar acelerado, sumido en sus pensamientos, sin ser consciente de sus pasos y observa a la gente abrigada, caminando con prisas practicamente arrastrando a los niños al Colegio, con semblantes serios, con las bocas cerradas, con sus rutas fijadas y los ojos clavados en las aceras.... movimiento, velocidad, ruido, estrés...
... Cuando por fin llega a su destino, se quita el abrigo, y con un café en la mano y la luz aún sin encender, vuelve a cerrar los ojos para poco a poco ir abriéndolos y sentir algo diferente... silencio, tranquilidad, soledad, sosiego, oscuridad, respiración, camino a la relajación ...

Ya una vez sentado en su mesa de trabajo se da cuenta que, aunque seamos muchos, aunque vayamos personas juntas en un mismo tren, en un mismo autobús, o caminemos al lado unos de otros, estamos sumidos en una profunda soledad, en un aislamiento exagerado, sin una mínima comunicación, sin un pequeño atisbo de querer relacionarnos, aunque sea por educación...

En alguna ocasión he entablado conversaciones cortas con desconocidos, comentarios sin importancia, simplemente por el hecho de romper la frialdad, de sonsacar una sonrisa... no se trata de entablar una relación fraternal ni de contarle mi vida a nadie, consiste simplemente en cambiar los amargos semblantes, en compartir un saludo o una sonrisa, en no sentir esa soledad que hay a pesar de estar rodeados de gente..... si alguna vez nos encontráramos en algún lugar, me podéis hablar con toda tranquilidad lo estaré deseando....

Vaya, otra de mis locuras matinales.... pero tenía ganas de escribir.... un abrazo.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Es cierto, somos muchos, pero muchas veces estamos muy solos.

Isabel Burriel dijo...

A veces se agradece que entre tanto mutismo, entre tanto anónimo alguien se acerque y te diga algo bueno.
A veces pasa...
Un beso

Anónimo dijo...

Cuando viajaba en autobús, sí que lo hice alguna vez, lo de hablar con la persona de al lado, y encuentras gente agradable. Es una pena que no nos relacionemos más. Un beso.

Zafferano dijo...

Descuida, cuando nos crucemos hazme un guiño para saber que eres tú.
Yo también he hablado a vecescon desconocidos, en un ascensor, en una tienda, en el médico, y me quedo toda contenta después. Es como haber roto un sortilegio, el individualismo.

Besos!

Agne dijo...

yo soy una desconocida con la que has hablado. Tb tengo derecho a saludarte si un dia fortuitamente nos encontramos? :P

Dicen que el tener miedo a la oscuridad no es más que tener miedo a la soledad... ¿Se podrá aplicar a la inversa?

Besitos & Sonrisas

Anónimo dijo...

Yo soy de las que saludo. Así que no te cortes si me ves. jajajaja.
Un beso

Spirit of dreams dijo...

LA verdad que no puedo más que darte la razón, pero a veces me gusta esa soledad, la busco yo misma, no sé, es un momento para reencontrarme conmigo misma...
No obstante, si te veo, entablaremos una conversación;)
Cuídate, besos y un big abra:
Spirit of dreams;) (f)